Un nuevo premio, un nuevo meme que recibo de Carlos Neri en Moebius. Vaya compromiso en el que me coloca Carlos porque la verdad es que un premiar a un blog solidario es distinto a premiar a un blog que me haga pensar y, sin embargo, pensando en mi lista, hay coincidencias.

Hay blogs y bloguers que me han acompañado e impulsado desde los comienzos y que tienen para mi una importancia fundamental. Sin mucho orden jerárquico (aunque los dos primeros lo tienen) y haciendo una «trampita» porque sino no podría mencionar a algunos porque se me agotaría el cupo, paso a mencionarlos:

E-cuaderno : no es ninguna sorpresa y no puede ser de otra manera. Ya me pongo fastidiosa de tanto contar lo importante que fué para mi haber cursado el taller de escritura Web con José Luis Orihuela pero, en este caso, el nombramiento es más bien por su presencia y apoyo a veces silente y muchas veces en clave, para Ciberescrituras.

Moebius : tampoco es una sorpresa pero es inevitable su presencia en esta lista. Y acá viene la trampa porque no puedo premiarlo a él sin premiar tambien a Karpicius y a Diana , mis compas de Proyectos al Sur. Valga esto como reconocimiento a la importancia de cada uno de ustedes y de sus escrituras para mí y para Ciberescrituras. No estaría aquí, como estoy, sin ustedes y el presente y el futuro no sería tan intenso y divertido si no lo soñáramos juntos.

Convalor : Txetxu también tiene mención aparte en este Premio. No nos conocemos personalmente (ni hace falta en este medio donde nos conocemos por lo que escribimos, lo sé) pero desde Convalor y las distintas aventuras digitales con las que nos sorprende siempre ha tenido guiños especiales para conmigo.

Depósito de cachivaches : de Pedro Fanega, uno de esos seres casi mágicos que uno se consigue por estos lares. Un hombre esencialmente solidario que, además, entrega su vida a ello como también lo hace con sus lecturas y escrituras.

La brújula verde : de Guillermo Carvajal. Otro más que se encuentra más allá de cualquiera de estos premios, pero que para mi es importante. En celebración a la sincronía permanente. En agradecimiento a su presencia silente y a sus respuestas siempre amables, pertinentes y enriquecedoras.

Quedan varios fuera pero que igual están tan cerca. Lástima, peor la consigna es de cinco.